
Hay un barrio de rascacielos en Tokio que se llama Marunouchi. El atardecer, es un momento acogedor en el barrio financiero y económico que recupera su tiempo de tranquilidad. El barrio está justo entre la estación de Tokio y el palacio imperial donde antes estaba el castillo de Edo. En aquella época, esta zona estaba rodeada por los fosos interiores y exteriores del castillo y las mansiones de los Daimyos. Después durante la época de Meiji, esta zona fue ocupada por instalaciones militares hasta que el grupo empresario Mitsubishi arrancó un proyecto de desarrollo urbano. Cuando paseamos por el barrio de Marunouchi sin rumbo fijo, encontramos varias historias de la modernización de Japón.